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Mª Teresa Voltes: “Si otras ingenierías se formasen en el área agrícola, sería perfecto para las múltiples situaciones que se dan en la industria”

Colegiado del mes

19
jun
2024

Mª Teresa Voltes: “Si otras ingenierías se formasen en el área agrícola, sería perfecto para las múltiples situaciones que se dan en la industria”

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Socia Responsable Gestión de Riesgos en ETVALIA. Colegiada del Col·legi d'Enginyers Tècnics Agrícoles i Forestals de Catalunya (CETAFC).

María Teresa Voltes dedica su día a día profesional a ayudar a empresas que han tenido un gran siniestro. Gracias a su formación como ITA, su capacidad de gestión y su resiliencia es capaz de adaptarse a las necesidades de cualquier industria. Afirma que aunque conciliar es complicado, nunca ha sentido brecha de género. No obstante, reconoce que en muchas reuniones es la única mujer y, además, no ve un cambio sustancial a largo plazo. Te dejamos con ella para que puedas conocerla mejor.

Cuando sucede un gran siniestro en una empresa, ¿por qué les llaman antes o a la vez a ustedes que al seguro?

En España la "Ley de Contrato de Seguro" Ley 50/1980, que es la normativa legal que regula el sector asegurador, recoge la figura del perito nombrado por el asegurado para asesorarle en la gestión de un siniestro; en particular el articulo 38 regula nuestra intervención.

En grandes empresas es habitual que conozcan nuestra figura y sean ellas mismas quien contacte directamente con nosotros. En otros casos son los mediadores de seguros que conocen nuestra trayectoria profesional quien propone nuestra intervención, aunque siempre es el asegurado quien toma la decisión.

Pero también hay veces que somos nosotros quien nos presentamos directamente a la empresa que ha sufrido un siniestro a exponer nuestra actividad profesional.

¿Qué aporta la intervención de ETVALIA a una empresa que ha sufrido un gran siniestro?

Nosotros como perito de empresa utilizamos el mismo lenguaje y conocemos la praxis del perito de la compañía, circunstancia que permite acelerar la resolución del siniestro y prevenir errores que puedan perjudicar al asegurado.

Realizamos un asesoramiento personalizado a cada caso, defendiendo en todo momento los intereses de la empresa asegurada.

En Etvalia nos dedicamos exclusivamente a la defensa de los intereses de la empresa y somos totalmente independientes, ya que no trabajamos para ninguna compañía de seguros.

Preparamos la reclamación que se debe enviar al perito de la compañía, conjuntamente con la empresa y negociamos para conseguir la indemnización más optima y justa a tenor del alcance del siniestro que ha sufrido.

En muchas pólizas industriales van incluidos los honorarios de peritos, por lo que pueden ser recuperables como parte de la reclamación.

Desde Lleida, nosotros atendemos clientes por toda España, y en ocasiones hemos gestionado siniestros de clientes fuera de España, en Latinoamérica y en otros países de Europa.

Trabaja con ingenieros de otras disciplinas. ¿Cuáles? ¿Con qué otras ingenierías hay flechazo laboral?

Dentro de nuestro sector coincidimos sobre todo perfiles de ingenieros, aunque de disciplinas muy distintas: industriales, caminos, químicos, informáticos…

También coincidimos con otros perfiles como economistas, arquitectos, veterinarios…

Es habitual en grandes siniestros intervenir distintos perfiles profesionales para poder aportar puntos de vista distintos y complementarios; aunque en la valoración de daños es igual de importante conocer los procesos industriales afectados, así como la comprensión e interpretación de la póliza de seguros.

Su desarrollo profesional es una gran muestra de los distintos perfiles profesionales que tiene un Ingeniero Técnico Agrícola (ITA), ¿cómo ha sido su evolución profesional hasta llegar a ser socia fundadora de ETVALIA y cómo le ha ayudado su formación en Ingeniería Agrícola a alcanzar y desarrollar este puesto?

Durante casi 20 años he estado trabajando en distintas empresas como ITA. Inicialmente desarrollé toda mi carrera en empresas agroalimentarias realizando trabajos de gestión, tanto de calidad como de producción.

Hace 10 años me surgió la oportunidad de fundar con mi socio ETVALIA, donde aporto la parte de organización, capacidad de gestión de datos y formación en gestión de riesgos. En estos años hemos conseguido crear un equipo diverso, complementario y con gran capacidad de adaptación.

Siempre he considerado que nuestra formación nos proporciona un perfil muy técnico de ingenieros, pero a la vez tenemos una capacidad de adaptación a las circunstancias de cada momento por nuestra formación más ‘agronómica’, que es la parte de nuestro entorno que nunca es 100% segura.

Una vez un abogado me comentó algo que lo define a la perfección. Me dijo que nuestra formación era muy interesante porque teníamos la mente cuadrada de un ingeniero y la mente adaptativa de un biólogo. Con sinceridad creo que si otras ingenierías se formasen en el área agrícola o agrónoma sería perfecto para un análisis global de múltiples situaciones que se dan en la industria.

A nivel de barreras de género, ¿cuál es su experiencia en el sector?

Nunca he tenido problemas en cuanto a que se considerase mi valía profesional. Lo que sí ha sido una barrera es la conciliación familiar. Nosotros, en el momento que sucede el siniestro, tenemos una implicación del 200% y se ha de tener en cuenta que el cliente está en una situación de crisis y que ha podido perder gran parte de su patrimonio. No siempre es fácil de dar esta respuesta directa e inmediata si tienes responsabilidades familiares.

En mi caso, esta limitación ha sido menor porque cuando inicié este proyecto mis hijos ya tenían una edad que me permitía poder asumir esta responsabilidad.

También se debe matizar, que, aunque no haya barreras de género, si que en muchas ocasiones puedo ser la única mujer en alguna reunión, y lo que más me disgusta es que no se ve un cambio sustancial ni a corto ni a largo plazo.

En nuestro caso se debe reconocer que no es un tema de falta de confianza en nuestro trabajo, sino que la dificultad de conciliación familiar en momentos puntuales lo pueden hacer poco atractivo para las mujeres.

En este punto, me gustaría subrayar que dentro de los peritos de compañía las pocas mujeres que hay, un porcentaje elevado son Ingenieras Técnicos Agrícolas.

¿Qué le impulsó a estudiar Ingeniería Técnica Agrícola?

He vivido ligada al sector agrícola desde que nací. Mis padres tienen una explotación agrícola y ese era nuestro día a día en casa, de hecho, llevo el tractor desde los 10 años. Somos tres hermanas y solo yo me he dedicado al sector, y lo cierto es que aunque me gusta mucho, me he dado cuenta de que soy más idónea para la gestión que en el manejo del día a día de una explotación.

He de decir que fue mi padre el primero que me ayudó a derribar barreras de género, me ayudó a creer en mí. Él nunca vio ni en mí ni en mis hermanas un límite, en casa jamás se escuchó ninguna idea similar.

Usted es secretaria de la junta de gobierno del CETAFC en la delegación de Lleida, ¿es importante la labor que hacen los Colegios por la profesión? ¿Por qué? Pónganos algún ejemplo de logros obtenidos por su Colegio Profesional en defensa y visibilidad de la Ingeniería Agrícola.

La junta de gobierno es un organismo clave para garantizar el buen funcionamiento del Colegio. En la delegación de Lleida hemos formado un equipo humano que, aunque todos somos ITA, tenemos perfiles personales y profesionales muy diferentes: algunos servidores públicos, otros en la empresa agropecuaria familiar, otros en la propia empresa, otros como asesores técnicos… Y esta heterogeneidad nos permite conocer la situación de sector puntualmente, y a partir de estas sinergias, junto con la dirección técnica formada por dos mujeres, se ofrece a los colegiados y colegiadas, asesoramiento, formación y promoción.

El Colegio Profesional colabora con la Universidad de Lleida en proyectos y divulgación de nuestra profesión. Colaboramos con el sector primario en la organización de congresos nacionales del sector del porcino, cuya provincia de Lleida es pionera en desarrollo y explotación. Colaboramos con organismos públicos en la organización de jornadas técnicas de fruticultura, en la organización de cursos técnicos y divulgativos…

Pero todo ello no seria posible si el propio colectivo de ITA no se implicara y participara en los eventos y las iniciativas que se promueven en la junta de gobierno del Colegio.