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20 dic 2023
Director de Innovación Agronómica en Grupo Fertiberia. Colegiado del Colegio de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Andalucía Occidental (COITAND).
Javier González Paloma no se suele quedar con la primera opción. Siempre busca dar un paso más, bien a la hora de mejorar un proceso o para que éste sea aún más innovador. Y andando ese camino del inconformismo ha llegado a la dirección de innovación agronómica de Grupo Fertiberia, referente para la nutrición vegetal y la industria agroalimentaria. González Paloma es, además, un Ingeniero Agrícola convencido de que la Ingeniería Agrícola tendrá papel protagonista en el proceso de digitalización del campo. ¿Y qué opina de la colegiación? Que no hay mejor manera de hacer corporativismo para defenderse del intrusismo. Te invitamos a conocerle un poco mejor en esta entrevista.
Nunca lo había pensado, pero creo que puede ser debido a mi carácter inconformista y analítico, siempre pienso en mejorar, en subir un escalón, y trato de hacerlo por caminos sencillos. Mi vida laboral, aunque empezó en el sector de las semillas y de la ingeniería de sistemas de riego, me condujo de una manera protagonista por la senda de nutrición vegetal, teniendo que decidir siempre la mejor fertilización disponible en las condiciones de cada finca y en cada proceso de asesoramiento que se me planteaba.Esta necesidad de tomar decisiones me ha llevado a informarme continuamente sobre las nuevas alternativas de productos y usos que aparecían en el sector, y así es como me fui introduciendo poco a poco en el mundo de la innovación, primero conociéndolo y una vez con la formación suficiente, tratando de crear nuevas soluciones a través del desarrollo de nuevos productos que mejoren los que existían.
Una parte de los fertilizantes que se aplican se pierden en el medio, suponiendo por un lado una pérdida de la inversión y por otro un impacto ambiental. El sector está en continua búsqueda de nuevos aditivos o fertilizantes que minimicen estas pérdidas. En Fertiberia hemos desarrollado para los fertilizantes sólidos, un recubrimiento con polímeros biodegradables que tras humedecerse, retienen los nutrientes disponibles en el suelo durante más tiempo evitando pérdidas.Más recientemente y como gran innovación, hemos incluido en nuestros productos componentes biotecnológicos, microorganismos que permanecen activos dentro del fertilizante, que aportan una mejora de la eficiencia y un añadido bioestimulante a los cultivos. Esto es una novedad importante por la dificultad administrativa que presenta el registro de un fertilizante incorporando microorganismos.Sobre el biocontrol de los cultivos también hemos avanzado mucho, desarrollando soluciones basadas en extractos vegetales mejorados mediante procesos fermentativos, que tiene acción de control contra enfermedades fúngicas y contra algunas plagas de insectos.
Dos aspectos pienso que serán fundamentales y que hoy están en pleno desarrollo, la digitalización y el aumento de la sostenibilidad de las explotaciones en busca de una menor huella de carbono.La digitalización ya permite hoy un mejor uso de los inputs, apoyado en imágenes satelitales y el desarrollo de sensores específicos acoplados a la maquinaria, y estoy seguro de que la inteligencia artificial que en estos momentos estamos conociendo sus inicios, también aportaran información muy valiosa a la hora de tomar decisiones.
La sostenibilidad, que ya hoy es un aspecto para tener en cuenta será mucho más importante en el futuro. El respeto al medio con productos y prácticas que tengan el menor impacto que la técnica permita va a ser lo normal, persiguiendo la rentabilidad de las explotaciones con la menor huella posible.Estoy seguro de que en el futuro, los productos de alto valor serán aquellos que se presenten al consumidor con una baja huella de carbono.
No hay empresa agroalimentaria que de una u otra manera no tenga interacción con un Ingeniero Agrícola, somos parte fundamental de la industria agroalimentaria. La versatilidad de nuestra profesión nos permite participar en toda la cadena, desde el campo a la industria, pasando por las certificaciones, las gestiones administrativas y la comercialización.Con respecto a la fertilización, seguro que todas las explotaciones agrícolas alguna vez ha tenido que asesorarse con un técnico para definir sus planes de abonado, ajustar dosis, tipo de producto, momento de aplicación, equilibrio nutricional, interpretación de un análisis de suelo, vegetal o de agua. Aquí es donde el Ingeniero Agrícola puede aportar su conocimiento y experiencia para solucionar problemas con el mejor planteamiento de fertilización.
La Universidad es el medio de cultivo perfecto para la innovación. Estar rodeado de conocimiento y de equipos tecnológicos, facilita la puesta en marcha de nuevos proyectos, ayuda a perfilar objetivos medibles y, algo muy importante para las empresas, reduce el “time to market” para los nuevos productos en desarrollo.La investigación puede ser infinita, siempre se puede seguir adquiriendo conocimiento, pero formar un equipo de trabajo entre los grupos de investigación de la Universidad y los técnicos de una compañía como Fertiberia, permite desarrollar proyectos conjuntos que tienen como final el desarrollo de un producto real, que pueda ponerse en el mercado.
La verdad es que hasta la carrera nunca había tenido relación con el mundo agrícola, siempre me había sentido atraído por la química y la biología de los seres vivos, y cuando tuve que decidir qué carrera estudiar no lo tuve demasiado claro, así que me fui informado sobre diferentes posibilidades, preguntando a conocidos que ya estaban cursando carreras, y de Agrícolas me llamó la atención la cantidad de aspectos diferentes que se tocaba en la carrera, y eso fue lo que me decidió a matricularme.Hoy no puedo estar más satisfecho con haber tomado esa decisión, así que desde que terminé soy un urbanita que hace apología continua de lo necesario que es el sector agrícola.
La ingeniería Agrícola es una profesión regulada (BOE de 19/01/2009), y para ejercer una profesión regulada hace falta estar colegiado en el Colegio Profesional correspondiente.Hay muchos compañeros que no se colegian aunque estén trabajando en el sector agrícola, pensando que si no visan proyectos no lo necesitan, pero la verdad es que somos un sector donde la demanda de profesionales es amplia y la mejor manera de poder defender la cantidad y la calidad de nuestro trabajo es haciendo corporativismo agrícola.Estar acogidos dentro de un Colegio profesional sirve para que podamos defendernos ante el intrusismo, que te mantenga informado de las continuas variaciones legislativas relativas al sector agrícola que tanto nacionalmente y a nivel europeo se están produciendo, estar informado de las continuas ofertas de trabajo que se reciben en el Colegio y, como no, para estar en formación continua sobre temas de interés que nos permitan mejorar nuestra oferta como técnico y acceder a sectores donde aún no estamos presentes, o mejorar dentro del que ya estamos. Estar colegiado tiene un retorno muy positivo de la inversión que supone pagar la cuota de colegiación.
La agricultura está sometida cada día a mayor control desde todos los sectores que la rodean. Sin ir más lejos, desde septiembre de 2024 será obligatorio un cuaderno de campo digital, que será manejado en muchos casos por Ingenieros Agrícolas.Desde Europa hay estrategias que proponen la reducción del uso de materias activas fitosanitarias, y aunque se ha parado en primera instancia, pienso que en un plazo corto sí que se verán afectadas. También se proponen reducciones de fertilizantes o el uso de aditivos que los hagan más sostenibles.Aún no tenemos desarrolladas las tecnologías sustitutivas para mantener nuestra seguridad alimentaria, así que el trabajo desde hoy es el de adaptar la agricultura de 2023 a la 4.0 con prácticas e inputs que se puedan adecuar a los requisitos que la sociedad nos está pidiendo, usando todas las herramientas a nuestro alcance como la mejora genética y la digitalización como las más potentes.Hoy somos pieza clave en el sector agrícola, pero en el futuro seremos mucho más protagonistas porque el sector será más tecnológico y los Ingenieros Agrícolas seremos los garantes del buen uso de esa nueva y necesaria tecnología.
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Colegiado del mes
C/ Guzmán el Bueno, 104 - Bajo Madrid 28003 - ESPAÑA Tfno: 91 323 28 28 - 91 315 91 91